Hola bischilectores!
Me ha costado mucho encontrar el momento para seguir recopilando mi aventura californiana, pero ahora mientras escribo estas primeras lineas tras haber terminado lo que he decido que sea la Toma 3, he de confesar que ha sido una vuelta atrás que volvería hacer mil veces, y que cuando consigo encontrar «ese ratito» la satisfacción es indescriptible, por recordar un viaje tan emocionante, con tan buena gente con la que he creado unos recuerdos tan únicos e irrepetibles para cada uno de nosotros.
Aun no lo he terminado, pero creo que este ha sido el articulo en el que describo las cosas que mas me han gustado, aunque es difícil de asegurar ya que aun quedan muchos momentos a los que hacer memoria en mi baúl de los recuerdos, en los que me ayudo con todas las imágenes colgadas en mi cuenta de flickr.
Continuaré en la Toma: 4*
Así pues seguían los días en California, y los días habían de ser menos intensos que el primer día porque aun nos quedaban muchos días y mucho por hacer. Aprovechábamos sobre todos los fines de semana. Intentaré dividirlo un poco por partes.
El primer restaurante al que fuimos a cenar tras empezar el primer día de rutina (en limousine además) fue a «Henry’s World Famous Hi-Life» lugar al que tan solo te recomiendo ir si eres de buen comer y estas dispuesto a guardar la comida en tu estomago hasta tres días! (estoy exagerando obviamente) lo mejor es la americanada total que sientes nada mas entrar, parece que hayan rodado alguna película de las sobremesa allí.
Hay carteles de su fama en toda el restaurante. Nada mas entrar te encuentras con una barra de bar donde puedes ir tomando algo mientras que esperas que te toque el turno para comer, como nosotros siempre íbamos en grupos de bastantes personas, nos tocaba esperar casi siempre un mínimo de media hora. Elegir aquí fié fácil si te gusta la carne.
El siguiente lugar que visité para cenar, fue un Pub Irlandés llamado Rosie MacCanns, en Santana Row, una de las calles por las que mas pasearíamos, el bar/restaurante curiosamente horas mas tarde se convertiría en una discoteca donde la música no estaba nada mal. Aquí elegir no fue tan fácil ya que la carta era bastante amplia entre pasta, pizza, carnes, hamburguesas, etc… aunque el lugar era bastante ruidoso, tuvimos una buena experiencia, y la comida… mmm! deliciosa! La camarera que se encargó de nuestra mesa fue bastante simpática y no tuvo ningún problema en aconsejarnos un buen plato, es algo que, como turista, me gusta apreciar. @RosieMaccanns
1 Junio 2013
El siguiente día de ruta, tocaba día completo al ser fin de semana y tras el desayuno en el hotel y organizar los coches, hoy visitaríamos «Big Basin Redwoods» así que como el camino era largo, decidimos comer algo rápido para no perder mucho tiempo en «Ike’s Lair» un restaurante de comida rápida cuya cadena me encantaría que llegase a España, son unos bocadillos con nombres súper simpáticos que te hacían la boca agua con tan solo leer de lo que estaban compuestos. Mi elección fue un «Ménage à tris» mi elección no pudo ser mas acertada!
Puedes curiosear su página web.
Una vez llegamos a Big Basin Redwoods tras encontrarnos con una exteeeeeeeeeeeeeeeeensa caravana, las fotos fueron las protagonistas del momento. Árboles tremebundamente grandes, caminos largos para caminar. Una belleza natural que sin lugar a dudas hay que descubrir. Si hacéis click en la fotografía de la derecha vereis a Carlos (de Canadá) posando con un árbol cortado con descripciones en los anillos, una foto que muestra un ejemplo de cuan gigantescos eran los árbolitos de allá.
Me hubiera gustado pasar mas tiempo allí, hacer un picnic o algo así, es un lugar para perderse y encontrarse a uno mismo entre cascadas, el sonido de los pájaros y el de las hojas acariciadas por el viento.
Por si no hubiéramos caminado bastante, tras las casi 3 horas que estuvimos por Big Basin Redwoods, nos fuimos camino a Santa Cruz, donde descubriríamos «Boardwalk Beach«, un parque/feria permanente junto a la playa. Una playa que me recordó muchísimo a la de mi Cádiz por el tipo de arena y amplitud, aunque no puedo opinar del mar ya que en la estancia que estuvimos allí me quedé con las ganas de ir a la playa (lo dejo en tareas pendientes para mi próxima visita a «The Estates»).
Me fascinaron las vistas del skyline que te regalaban las atracciones mientras el sol descendía hacia el horizonte, aproveché un paseo por las tiendas en compañía de las chicas donde me compré varios recuerdos entre ellas camisetas y alguna cosa mas.
Una vez reunidos tras espera a que los chicos terminaran de jugar al fútbol en la playa, probamos algunas cositas de comer en las tiendecitas que había junto a la costa y nos planteamos ir a descansar un poco las piernecitas, que para mañana también teníamos planeada una buena agenda.
La costa de Santa Cruz desde la playa con mi Olympus Pm1 (sin filtros)
2 Junio 2013
El dia hoy empezaba con un buen desayuno, hoy era un día de los que mas me emocionaba ya que tocaba hacer una de las cosas que mas ilusión me hacia: ver el Golden Gate, tras verlo en tantas películas y escuchar tantas veces de mi madre «Yo quiero una foto tuya en el puente rojo de las películas».
Así que me comí un buen Waffle, de los que me hice muy adicta y los que fueron causantes de algún que otro kilo extra, había mañanas que podía comerme perfectamente dos, mas todo lo demás, café, cereales, desayunar en los hoteles para mi es un vicio!
Tomamos la carretera de camino al puentecito, y antes de hacernos fotos y soportar el viento que nos habían advertido que haría allí, hicimos una parada para llenar la barriguita en «Mel’s Drive-In» al mas puro estilo «Tommy Mel’s» americano de la época de Grease.
Allí decidí no comer tan mal y elegí u sandwich vegetal con pavo, o como lo llaman allí, con «turkey» que daba el nombre del plato «Turkey Melt’s»
En la foto, aparezco con Shan, la chica de Hong Kong.
Y llegó el momento esperado, aunque no hicimos lo que me hubiera gustado, que es pasear por el puente de punta a punta (otra de las cosas que me guardo para mi próxima visita, lo típico es un bicho, pero yo lo quise haber hecho a pie) no escatimamos en fotos tanto en grupo como, como a otros, como pidiendo ser protagonista en las fotos. Fueron varios los puntos elegidos a los que fuimos en coche para ver el puente desde diferentes puntos de vista. Luchando contra el viento húmedo que tanto chocaba con el calor que estábamos sintiendo en esas fechas.
Hicimos fotos desde abajo, luego un poco mas arriba donde había un hombre pintando, y mas arriba donde tuvimos que medio escalar y subir una cuesta donde veríamos la otra parte, y el puente y san francisco desde el otro lado.
Habían bastantes puntos mas que luego descubrimos en las fotos que compartieron con nosotros los otros compañeros que se separaron del grupo, ya que tuvimos un pequeño incidente con el coche de alquiler.
El pintor del punto medio de los lugares que fuimos a ver.
Aqui posando con Emily de China y Marck de Suecia.
Volvimos a San Francisco a pasear por las calles que ya anduvimos unos días antes y a conocer algunas calles mas, aparcamos el coche e hicimos paradas en algunas tiendas que teníamos pendientes, y entre ellas fue el Starbucks para tomar un necesitado café y comprar mi mítica tacita para la colección, y donde me cambiarían el nombre por «Munson«.
Visité la tienda Disney, donde compré camisetas, pins y algún detalle mas para regalar. Tras pasar por la apple store para cargar el móvil, fuimos de paseo por el barrio chino donde compré muchos recuerdos (la mayoría imanes) e hice fotos y fotos y…. mas fotos.
En la foto Adam (de Chicago) con quien parecía competir para ver quien hacía mas y mas fotos!
De ahi nos iriamos hasta Pier 39 donde cenaríamos en el restaurare ambientado en Forrest Gump, si has visto la película (que ya es raro no haberla visto) recordarás el negocio que Forest hizo.
Es esencial que te encanten las gambas para comer aquí, como su nombre indica es «Bubba Gump»
Las vistas del restaurante si tienes el privilegio de tener nuestra suerte y pillar sitio al lado de la ventana, son impresionantes. Nosotros fuimos a cenar, y desde allí pudimos apreciar el anochecer, como el sol nos obligaba a despedirmos de un fin de semana agotador.
Además, la velada estuvo acompañada de la visita de los camareros que iban preguntando que tal iba todo y a hacernos adivinanzas sobre la película y algún que otro chiste (que me costó entender).
La verdad es que el restaurante a mi me encantó, como broche final del fin de semana, fue ideal.
Cabe mencionar que, como tuvimos que esperar a tener mesa, hicimos una visita a una tienda de recuerdos junto al restaurante con merchandising sobre la película y sobre todo del restaurante, que estaba lleno de detalles a cual mas chulo (donde por supuesto, compré maaaas recuerdos).
Y de aqui, nos fuimos a dormir al hotel.
Y para despedirme de vosotros hasta el próximo capitulo de mi aventura Californiana, os regalo una de las fotografías de la puesta de sol desde el puerto de Pier 39.
(Que fue curioso, porque fue sacar la cámara yo, y ver como todos los demás me imitaban jajajaja)
¡¡¡…Continuará en el Capitulo 4
Hasta muy pronto!!!!
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Nota:
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